Una obra que recomendamos con entusiasmo. Un valioso ensayo sobre la teoría de los "Alienígenas Ancestrales" como se conoce actualmente a la hipótesis del paleocontacto, es decir la presencia de extraterrestres en la prehistoria de la humanidad y sus implicaciones. Philip Coppens (1971-2012) realiza un ensayo sobre esta cuestión, haciendo gala de un gran conocimiento de los temas tratados. Repasa los indicios más potentes que se esgrimen para validar la teoría. Curiosamente avala algunas historias que parecían con el tiempo desautorizadas, como los discos de piedra de los Dropa, encontrados en la cadena montañosa de Baian-kara-Ula en China. Coppens recuerda dicha historia encontrando visos de veracidad, al igual que la tan mentada calavera de cristal de Mitchell-Hedges, contándonos cosas poco conocidas, por lo menos en idioma castellano. Por supuesto no pueden faltar los estudios sobre Nazca, las ruinas precolombinas de nuestra Amérika, Baalbek, la gran pirámide de Keops, las pirámides mayas, la "nave" de Ezequiel, los textos sagrados de la antigua India, la enigmática "Terra Preta de Indio" en la amazonia brasileña y un largo etcétera. Recomendamos leer con atención el capítulo dedicado a la historia de los dogones y sus supuestos conocimientos sobre las estrellas de Sirio, donde quedan grandes dudas sobre este famoso enigma; dudas similares a las ideas de Zecharia Sitchin y sus Anunnaki. Otro capítulo atractivo es el destinado al misterio de la Cueva de los Tayos (Ecuador) y la biblioteca de láminas de oro. Dada la amistad de Coppens con Stanley Hall (uno de los buscadores de la biblioteca) y su relación con Von Daniken (quien prologa el libro que estamos recomendando), nos encontramos con algunas "perlitas" para los seguidores de la increíble historia de los Tesoros de Los Tayos.
Pero lo más fascinante del libro es, a nuestro juicio, las conclusiones a las que llega el autor. Aunque no descarta que en algún momento pudo haberse producido un esporádico contacto físico con seres provenientes de las estrellas (leyendas como la de Oannes, o los Dropa sean las mejores evidencias tal vez), Phillips Coppens creía que en realidad, basándose en las investigaciones de científicos como Terence Mckenna, los antropólogos Jeremy Narby y Michael Horner, existe "una inteligencia no humana de otro mundo con la que podemos ponernos en contacto de ciertas formas, muchas de las cuales se catalogarían en la actualidad como paranormales, parapsicológicas o (y este es un término que prefiero) metafísicas". Y dicho contacto podría ser a través de las "plantas de poder" como la Ayahuasca. Esta, o estas inteligencias ("los dioses"), según Coppens, nos habrían aportado "información tecnológica avanzada" a lo largo de la evolución de la humanidad.
Recomendado tanto para partidarios como descreídos.
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Philip Coppens (1971-2012) |
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